 
lunes, 28 de noviembre de 2011
vacío,roto..
El miedo es como la familia, que todo el mundo tiene una, pero aunque  se parezcan, lo miedos son tan diferentes y tan personales, como pueden  serlo todas las familias del mundo. Hay miedos tan simples como  desnudarse ante un extraño, miedos con los que uno aprende a ir  conviviendo. Hay miedos hechos de inseguridades, miedo a quedarnos  atrás, miedo a no ser lo que soñamos, a no dar la talla. Miedo a que  nadie entienda lo que queremos ser. Hay miedos que nos va dejando la  conciencia, el miedo a ser culpables de lo que les pase a los demás, y  también el miedo a lo que no queremos sentir, a lo que no queremos  mirar, a lo desconocido. Como el miedo a la muerte, a que alguien a  quien queremos desaparezca. Y hoy he escuchado a un señor en la tele, un  señor encantador, que decía que la felicidad es la ausencia de un  miedo. Y entonces me he dado cuenta de que últimamente, yo ya no tengo  miedo. Librarse del miedo es como quitarse la ropa delante de alguien, a  veces cuesta, pero cuando empiezas lo único que tienes que hacer es  seguir, sin dudar, y de repente te das cuenta de que el miedo ya no te  pertenece, ha desaparecido, como esa ropa que un día dejas de usar.
Suscribirse a:
Enviar comentarios (Atom)
 
No hay comentarios:
Publicar un comentario